How Elim Developed Training Material

by Mario Vega

For a long time, our leader’s training course was too simple. There were only four lessons that we taught in four weeks. When we realized that cell ministry is a leadership strategy, we started looking for a better way to train our leaders.

We reviewed the training materials of various cell churches around the world. We discovered, however, that many of these training courses were too long and didn’t fit the context of our culture. Given that fact, we decided to create our own training course.

We needed the following elements:

• not too long but not too short either
• a simple course, without technicalities that could discourage new believers
• A course which could lead a person from his conversion to leadership.

In the end, our course was completed with 26 lessons to be imparted in six months.

They are designed so that each lesson is given in an hour. It starts in a very basic way, according to the understanding of a new convert and ends with technical details of the cell work.

Creating our own material allowed us to overcome the difficulties I mentioned at the beginning. Many churches will find it easier to adopt ready-made material that responds to their culture and particularities. It is a good way to start. God will tell you later if it is necessary to create your own training course or not.

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Mario

Translation into Spanish

El curso de entrenamiento de lderes en Elim.

Nuestro curso de entrenamiento para lderes fue durante mucho tiempo de lo más sencillo que se pueda imaginar. Solamente cuatro lecciones que se impartan en igual cantidad de semanas. En la medida que el tiempo pasó, y al comprender que el trabajo celular es una estrategia de liderazgo comenzamos a buscar una manera mejor de entrenar a nuestros lderes.

Revisamos los materiales de entrenamiento de varias iglesias celulares en el mundo. Sin embargo, el común denominador era que resultaban ser cursos largos y fuera del contexto de nuestro pas. Ante ese hecho, decidimos crear nuestro propio curso de entrenamiento.

Los elementos que necesitábamos eran los siguientes: un curso no tan largo pero tampoco tan corto como para dejar una formación insuficiente. Un curso sencillo, sin tecnicismos que pudieran desalentar a los nuevos creyentes. Un curso cuyos contenidos pudieran llevar a una persona desde su conversión hasta el liderazgo.

Al final, nuestro curso fue completado con 26 lecciones para ser impartidas en seis meses. Están diseñadas para que cada lección se imparta en una hora. Comienza de manera muy básica, de acuerdo a la comprensión de un nuevo converso y termina con detalles técnicos del trabajo celular.

El crear nuestro propio material permitió superar las dificultades que he mencionado al principio. Posiblemente a otras iglesias les resulte mejor adoptar un material ya elaborado y que responda a su cultura y particularidades. Es una buena forma de comenzar. Más adelante Dios dirá si es necesario crear un curso de entrenamiento propio o no.