Cómo mantener la Oración

Los Básicos Celulares

por Joel Comiskey

Summer 2014

Es maravilloso emocionarse sobre la oración durante una conferencia o después de visitar una iglesia que da prioridad a la oración. Pero, ¿cómo una iglesia o célula puede mantener la oración a lo largo? Permítanme sugerir dos principios:

  1. Ejemplo de Liderazgo. Hemos estado leyendo los blogs de Rob Campbell y Cecilia Belvin. Rob Campbell creía en la oración tanto que la primera persona que contrató fue el pastor de oración! Rob, Cecilia, y el liderazgo de Cypress Creek Church ejemplifican la oración para que otros sigan. Esto es cierto para todas las iglesias donde la oración es la prioridad. Pero, ¿cómo que el pastor hace que la sea la prioridad? O si tu eres un líder de una célula, la pegunta es lo mismo: , ¿cómo puedes prioritizar la oración para que su grupo celular seguirá?
  2. Pedir al Espíritu Santo que le de “auto-contro” de sí mismo para dar prioridad a la oración. El apóstol Pedro dice en 1 Pedro 4:7: “Mas el fin de tosas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración” (Reina Valera). La Nueva Internacional queda más clara, “Ya se acerca el fin de todas las cosas. Así que, para orar bien, manténganse sobrios y con la mente despejada.” La versión NVI aquí esté traducida correctamente porque coincide con el texto griego, que dice que la oración es el resultado del auto-control (esto no es claro en algunas traducciones). Pedro está diciendo que el resultado de una mente despejada y auto control es la oración. Y recuerde que el auto-control (dominio propio) es el fruto del Espíritu (Gálatas 5: 23). Usted no puede controlarse a sí mismo, sino el Espíritu Santo puede llenarte y darte el control de sí mismo para dar prioridad a la oración. Pídele que te dé el dominio propio de tal manera que la oración sea tu prioritidad.

Recuerdo que mi amigo Kevin Strong (que ahora está con Jesús) leyó mi libro Una Cita con el Rey antes de su publicación. Él dijo: “Joel, me encanta este libro, pero el problema que encuentro con la gente es que ellos saben acerca de la necesidad de una vida devocional y la oración, pero les falta el deseo y la pasión.” Sabía que Kevin tenía razón, pero también me di cuenta de que mi libro no podría infundir esa pasión. Sólo Dios puede. Por lo tanto, la respuesta es que el Espíritu Santo llene una la persona para que oración sea la prioridad.

Si tu no estás dando prioridad a la oración en tu iglesia o grupo celular, tu necesitas pedirle al Dios que te dé el fruto del dominio propio para que tu la oración sea muy importante. Dios lo hará y tu gente estará muy agradecido.

Joel