Cómo las Iglesias se Conectaron Más Allá del Hogar

Liderazgo Pastoral

por Joel Comiskey, capitulo 9 de Fundamentos Biblicos

2013

En la universidad Bíblica, mi catedrático de homilética nos instruyó a que nos relajáramos con nuestros sermones después de veinticinco minutos porque la mayoría de congregaciones no toleraban más de treinta minutos de mensaje. Yo estuve inmediatamente de acuerdo ya que no estaba seguro si podía encontrar suficiente material para predicar más de treinta minutos.

Sin embargo, al mirar atrás, no recuerdo hablar acerca de cuánto tiempo se tomaban los apóstoles en sus sermones o si se paraban o no detrás de un púlpito. Y, ¿daban ellos sermones? Yo sólo asumí que un sermón de veinticinco minutos era bíblico. Hice similares suposiciones acerca de los cantos los días domingos, anuncios, saludos, y programas de la iglesia.

Tal vez yo no hice suficientes preguntas. Tal vez mis catedráticos en realidad no sabían. Quizá no importaba porque el protocolo del día domingo ya estaba bien establecido en la iglesia protestante, y si era bueno para otras denominaciones, entonces nosotros sólo debíamos seguirlo.

Al volver atrás hasta la iglesia primitiva y preguntar qué hacían en realidad en esas reuniones de celebración, sólo podemos encontrar principios y patrones, en vez de respuestas dogmáticas. También debemos de estar abiertos para permitirle al Nuevo Testamento criticar nuestros patrones hoy.

Encontrar respuestas claras acerca de las reuniones de celebración en la iglesia primitiva no es tan simple, porque las relaciones entre las iglesias en las casas individuales y las iglesias de la ciudad variaban. Sin embargo, sí encontramos evidencia de que las iglesias en las casas disfrutaban de las relaciones entre ellas y que incluso se juntaban periódicamente como una iglesia reunida.

La Conexión entre las Iglesias en las Casas

En la carta de Pablo a los Corintios, él se dirige a la ecclesia individual que se reunía en el hogar de Aquila y Priscila (1 Corintios 16:19), pero también saluda a la ecclesia como a un todo (1 Corintios 1:2 y 2 Corintios 1:1). Wayne Meeks escribe: “Pablo imaginaba una conexión entre los convertidos dentro de una ciudad, región, y provincia…Pablo sólo escribió una carta a una ciudad o área, suponiendo que sería suficiente para todos los grupos.”

Las iglesias en las casas que Pablo plantó, en otras palabras, eran parte de una unidad más grande. Gehring escribe: “Muchos eruditos del Nuevo Testamento creen que ambas formas—Iglesias en las casas pequeñas y toda la iglesia como una sola unidad en ese lugar—existieron juntas una a la par de la otra a principios del cristianismo”[174] Gehring dice lo siguiente:

La prueba de una pluralidad de iglesias en las casas junto a toda la iglesia en un lugar determinado, nos daría una luz respecto al controversial tema sobre la aclaración respecto a la relación entre las iglesias individuales y toda la iglesia local, y entre la iglesia local y la iglesia universal.[175]

En otras palabras, los creyentes individuales y las iglesias en las casa se consideraban a sí mismos parte de una iglesia más grande que abarcaba toda la ciudad.

Nosotros también notamos la existencia de ambas predicaciones públicas así como también el ministerio de casa-en-casa. Por ejemplo, en algunos tiempos toda la iglesia se reunía en lugares no identificados para realizar el ministerio público. En Hechos 15:4, Lucas escribe: “Al llegar a Jerusalén, fueron muy bien recibidos tanto por la iglesia como por los apóstoles y los ancianos, a quienes informaron de todo lo que Dios había hecho por medio de ellos.”

Posteriormente en Hechos 15:22, leemos: “Entonces los apóstoles y los ancianos, de común acuerdo con toda la iglesia, decidieron escoger a algunos de ellos y enviarlos a Antioquía con Pablo y Bernabé.” Las iglesias en las casas individuales estaban vinculadas por el liderazgo que ocasionalmente reunía a todas las iglesias en las casas.”

Por ejemplo, el propio liderazgo de Pablo, era crucial para vincular entre sí a las iglesias en las casas. Vemos a Pablo y a Silas en Hechos 16:4 viajando de pueblo en pueblo, entregando las noticias sobre las decisiones alcanzadas por los apóstoles y los ancianos en Jerusalén. No estamos seguros dónde exactamente sostenían estas discusiones, pero sí podemos ver la conexión de liderazgo dentro de la red de las iglesias en las casas. Ken Giles, al escribir sobre este vínculo de liderazgo dice:

A menudo se supone que en la era del Nuevo Testamento no existían estructuras institucionales que vincularan a congregaciones individuales o iglesias locales con la comunidad cristiana más extensa, pero esto no es cierto. Las formas institucionales que se necesitaban y que eran las propias para este período comenzaron a aparecer muy temprano. En el libro de los Hechos Lucas sostiene que un grupo de ancianos con la supervisión general de la comunidad cristiana de Jerusalén estaba ya en su lugar para cuando se estableció la iglesia en Antioquía.[176]

Anteriormente mencioné el pasaje de Hechos 15 como ejemplo de este vínculo de liderazgo, pero Pablo habla de algo similar en 1 Timoteo 4:14: “Ejercita el don que recibiste mediante profecía, cuando los ancianos te impusieron las manos.”

En la iglesia de Jerusalén, esas asociaciones de liderazgo fueron especialmente claras pues leemos: “Y día tras día, en el templo y de casa en casa, no dejaban de enseñar y anunciar las buenas nuevas de que Jesús es el Mesías” (Hechos 5:42). En la iglesia de Jerusalén, el liderazgo apostólico reunía a todas las muchas iglesias de las casas.

Estas reuniones de toda la iglesia también pueden ser apreciadas en Hechos 21:5. Pablo está regresando a la iglesia en Jerusalén después de hacer su viaje misionero a los gentiles, y las Escrituras dicen: “Pero al cabo de algunos días, partimos y continuamos nuestro viaje. Todos los discípulos, incluso las mujeres y los niños, nos acompañaron hasta las afueras de la ciudad, y allí en la playa nos arrodillamos y oramos.”

Dado que la iglesia primitiva no tenía edificios permanentes o lugares de reunión específicos, ellos utilizaron una variedad de lugares de reunión para las asambleas más grandes, y en esta ocasión en particular ellos se reunieron en la playa. No tenemos un conocimiento específico de todos los lugares públicos en la antigüedad, pero sí sabemos que existían las reuniones públicas (Hechos 20:20).

A lo largo de este libro, hemos aprendido que el lugar principal de reunión era la casa. Las reuniones públicas, por lo tanto, parece que eran aquellas en las que se reunían varias iglesias de las casas, en cualquier lugar que estuviera disponible. Sí sabemos de algunos de estos lugares públicos.

Pablo utilizó el lugar donde enseñaba Tirano en Corinto; la escritura dice lo siguiente: “Así que Pablo se alejó de ellos y formó un grupo aparte con los discípulos; y a diario debatía en la escuela de Tirano” (Hechos 19:9). Algunas veces toda la iglesia se reunía en los hogares más grandes, como lo fue el caso del aposento alto donde los discípulos se reunieron en preparación para que el Espíritu descendiera (Hechos 1:12; 2:1).

En Roma Pablo manda saludos de parte de “toda la iglesia” a la cual él había reunido. Romanos 16:23 dice: “Saludos de parte de Gayo, de cuya hospitalidad disfrutamos yo y toda la iglesia de este lugar.” Pablo aquí hace referencia sobre toda la iglesia reunida en un hogar muy grande, pero el punto es que varias iglesias de las casas sí se juntaban para la reunión de celebración.[177]

Iglesias en las Casas Reunidas en una Reunión más Grande

No tenemos mayor información sobre las reuniones de celebración más grandes que se realizaban en todos los lugares de la región mediterránea. Sin embargo, sí sabemos que las iglesias en las casas individuales realizaban celebraciones juntas en Jerusalén y en Corinto.

En Jerusalén la iglesia primitiva se reunía en las casas para participar de la Cena del Señor y tener koinonia, pero luego esas mismas iglesias en las casas se reunían en el templo para escuchar las enseñanzas de los apóstoles. Hechos 2:46-47 dice: “No dejaban de reunirse en el templo ni un solo día. De casa en casa partían el pan y compartían la comida con alegría y generosidad, alabando a Dios y disfrutando de la estimación general del pueblo. Y cada día el Señor añadía al grupo los que iban siendo salvos.” Vemos acá, ambos tipos de reuniones, la de las iglesias en las casas como también las de esas iglesias en las casas que se juntaban para escuchar las enseñanzas de los apóstoles. Gehring escribe:

De nuestro texto podemos inferir que la iglesia primitiva se reunía para dos tipos de servicios de adoración, los cuales pueden ser distinguidos uno del otro sobre la base no sólo de su ubicación sino también por cómo era su arreglo organizacional. El mayor énfasis en la casa estaba en partir el pan. Los primeros cristianos sin duda participaron en las oraciones del templo que se llevaban a cabo en los patios del templo, y de allí pasaban al salón de Salomón donde se reunía toda la congregación, donde enfatizaban sobre la proclamación misionera y la instrucción bíblica.[178]

La vida en comunidad de la iglesia de Jerusalén era realzada por ambos, tanto por el grupo pequeño como por la experiencia del grupo grande. Ellos disfrutaban de la comunidad íntima de la Cena del Señor celebrada en los hogares, pero recibían una enseñanza más sólida en las reuniones más grandes.

Al escribir sobre la iglesia en Jerusalén, Gerhard Lohfink dice lo siguiente:

Los creyentes son una sola asamblea aunque su lugar para reunirse cambie. Ellos se reunían en el templo para alabar a Dios públicamente. Esto demuestra su afirmación de ser el Israel escatológico. Pero ellos también se reunían en casas privadas para celebrar la Cena del Señor. Una vez más se enfatiza la unanimidad de su asamblea.[179]

David Shenk e Irvin Stutzman hablan más sobre la actividad de la iglesia primitiva:

Las primeras congregaciones fueron iglesias en las casas, las cuales se reunían en pequeños grupos a lo largo de toda el área metropolitana de Jerusalén. Debido que la mayoría de hogares en el área de Jerusalén eran pequeños, podemos suponer que de diez a veinte personas se reunían en estos grupos celulares de comunión.

Probablemente 100-200 de estas pequeñas congregaciones, que se reunían en las salas a lo largo de toda el área de Jerusalén, se formaron a pocos días del día de Pentecostés. Sin embargo nunca funcionaron independientemente unas de las otras. Estos grupos celulares de hogar formaron otros grupos que comprendían la iglesia en Jerusalén, una congregación que por un tiempo se reunió en los alrededores del templo para realizar eventos de celebración.[180]

Tal como ya lo vimos el tamaño de las casas difería, y en realidad no sabemos cuántas iglesias en las casas existían en el área de Jerusalén. Solamente sabemos que se reunían bajo el liderazgo de los apóstoles para escuchar sus enseñanzas y para celebrar al Cristo resucitado, tal como lo menciona Hechos 5:42.

De manera similar, en Hechos 5:12 notamos que: “Por medio de los apóstoles ocurrían muchas señales y prodigios entre el pueblo; y todos los creyentes se reunían de común acuerdo en el Pórtico de Salomón.” El pórtico de Salomón era básicamente un portal o terraza afuera de la entrada Este del Templo de Jerusalén que podía alojar a un gran número de personas.

El segundo claro ejemplo lo encontramos en Corinto. Pablo dice: “Así que, si toda la iglesia se reúne y todos hablan en lenguas, y entran algunos que no entienden o no creen, ¿no dirán que ustedes están locos?” (1 Corintios 14:23). Pablo al hablar sobre toda la iglesia cuando estaba reunida, da a entender que en otros momentos los cristianos en Corinto se reunían por separado en pequeñas iglesias en las casas. No obstante, ambas eran consideradas la iglesia. Arthur G. Patzia escribe:

Todo esto ilustra que “la iglesia de Dios que está en Corinto” (1 Corintios 1:2) y “toda la iglesia” (holes tes ekklesias) mencionada en Romanos 16:23 consistía de varias iglesias locales, cada una algo diferente de la otra debido a su mezcla de etnias, y a los aspectos sociales y económicos de las personas. La referencia de Pablo a “la iglesia de Corinto” (1 Corintios 1:2) y a los creyentes reuniéndose “como iglesia” (1 Corintios 11:18), junto a la implicación que Gayo esta fungiendo como anfitrión de toda (holes) la iglesia (Romanos 16:23), sugiere que habían ocasiones en Corinto cuando todos los creyentes se reunían. Con el tiempo, estas cartas fueron compartidas con otras iglesias de la ciudad y leídas en sus servicios de adoración antes que un redactor las recogiera y las editara en su formato actual, 1 y 2 de Corintios.[181]

Gehring se imagina las reuniones de los grupos pequeños por separado, para enfocarse en la Cena del Señor y luego para reunirse nuevamente para escuchar la predicación de la palabra. Esto es bastante parecido con lo que ocurrió en la iglesia de Jerusalén.[182] En su libro The Theology of Paul the Apostle (La Teología del Apóstol Pablo), James Dunn toma nota de la iglesia grande/ énfasis en la iglesia pequeña de Corinto, cuando escribe:

Pablo podía hablar tanto de toda la congregación reunida en un lugar como “iglesia”, así como también de los grupos individuales en las casas dentro de esa congregación, como “iglesia” (1 Corintios 1:1;. 16:19). No se veía como si un grupo menoscabara el estado del otro. Donde sea que se reunieran los creyentes, eran “la iglesia de Dios.” La implicación de 1 Corintios 16:19 junto con 1 Corintios 14:23 (refiriéndose a toda la iglesia reunida) es probablemente que las reuniones de la iglesia consistían en reuniones de grupos de hogares pequeños más habituales intercaladas con reuniones menos frecuentes de “toda la iglesia” (¿semanal, mensual?)[183]

Dunn hace una especulación acerca de más reuniones regulares de la iglesia en la casa intercaladas con reuniones de celebración menos frecuentes. Esto pareciera una conclusión lógica porque las reuniones más pequeñas en las casas debieron haber sido más viables y prácticas. Reunirse en grupos más grandes en lugares públicos debe haber sido más difícil logísticamente hablando—y algunas veces hasta peligroso.

A pesar que la iglesia primitiva en Jerusalén se reunía diariamente en asambleas públicas, al menos por un tiempo, es improbable que esta práctica haya continuado. Todo lo que podemos decir con exactitud es que el formato de grupo pequeño y de grande, ambos existieron en Jerusalén y en Corinto.[184]

¿Qué hay de las iglesias en las casas en otras partes del mundo Mediterráneo? ¿Qué tan a menudo se reunían en las casas y en otras reuniones combinadas? Ya vimos el saludo de Pablo a toda la iglesia en Roma. Es muy probable que Pablo haya reunido a toda la iglesia, en una de las iglesias en las casas más grande, y de manera más periódica, ya que en Romanos 16:23 él usa la misma terminología que utilizó en Corinto: “Saludos de parte de Gayo, de cuya hospitalidad disfrutamos yo y toda la iglesia de este lugar.”

En Éfeso, en Hechos 20:20 vemos que el patrón de Pablo era enseñar públicamente y de casa-en-casa. La reunión del grupo más grande también se puede ver en el saludo de Pablo desde todas las iglesias en Asia (1 Corintios 16:19). Como parte del saludo general de Pablo a las iglesias en Asia, él específicamente menciona la iglesia en la casa de Aquila y Priscila, y el particular saludo de ellos a las iglesias. Pablo parece que insinúa que habían otros cristianos en Éfeso que no se reunían en el hogar de Aquila. Esto, junto con la relativamente gran iglesia en Éfeso, sugiere una pluralidad de iglesias en las casas en ese lugar.[185]

F.F. Bruce hace el siguiente comentario: “Tales iglesias en las casas parecen haber sido círculos de comunión más pequeños dentro del círculo de comunión más grande de la ciudad ecclesia”[186] Pablo reunía a este grupo más grande para predicarles y enseñarles públicamente, pero también ministraba de casa-en-casa.

Lo mismo se puede decir de la iglesia en Tesalónica. Pablo habla a toda la iglesia en su introducción: “…a la iglesia de los tesalonicenses que está en Dios el Padre y en el Señor Jesucristo” (1 Tesalonicenses 1:1). Así como en el caso de la iglesia en Roma y en Éfeso, podemos suponer que la iglesia en Tesalónica fue dividida para convertirse en iglesias en las casas. Probablemente los grupos en las casas se reunían para eventos de celebraciónes especiales, como cuando Pablo zarpó de Filipos después de la fiesta de los panes sin levadura, y se reunió con otros creyentes en Troas (Hechos 20:6).

Si había quinientos mil creyentes a finales del primer siglo, tal como lo sugiere Robert T. Glover, deben haber habido un sin número de iglesias en las casas. Es muy probable que esas iglesias en las casas se reunieran para servicios de adoración ocasionales tal como lo vimos en los ejemplos de Jerusalén y Corinto.

Los Diferentes Usos de la Palabra “Iglesia” para Pablo

Aunque los cristianos en el Nuevo Testamento usaron ecclesia para referirse a la iglesia, el uso normal y secular de la palabra simplemente se refería a una reunión de personas. Por ejemplo, la palabra ecclesia es utilizada para una reunión secular en Hechos 19:21-41 cuando los plateros se reunieron para conspirar contra Pablo y la predicación del evangelio. “La asamblea [ecclesia] estaba en confusión: algunos gritaban una cosa, otros otra cosa. La mayoría ni sabía por qué estaba allí.”

Siempre que se llevaba a cabo una reunión o una asamblea en la cultura griega, a esta se le llamaba ecclesia. Los cristianos, por supuesto, le daban un significado especial a esa reunión, pero la raíz del significado es simplemente un “grupo de personas reunido.”[187] La iglesia primitiva lo utilizaba para referirse a aquellos unidos por su vínculo común con Cristo. La palabra se convirtió en la afirmación de la especial identidad corporativa de la iglesia. Gerhard Lohfink le añade otro enfoque: “El verdadero origen de ecclesia de Dios es el Antiguo Testamento y las tradiciones judías del habla que derivan de ella. Finalmente, ecclesia apunta al pueblo de Dios reunido en el Sinaí”[188]

Los escritores del Nuevo Testamento utilizan la palabra ecclesia para referirse a la iglesia en un área local o en un lugar geográfico más amplio. Ambas, tanto la forma local- singular (Hechos 11:26; 13:1; 14:27; 15:3; 18:22; 20:17), y la forma plural de la palabra (Hechos 15:41; 16:5) son utilizadas para la iglesia.

En otras palabras, ecclesia abarca a todos los creyentes viviendo en una gran ciudad (Hechos 11:22; 13:1; 1 Corintios 1:2) así como a la ecclesia en el hogar. Alan Richardson escribe: “El significado técnico de ecclesia se puede resumir sin referencia al tamaño, ubicación, u organización oficial: “la palabra ecclesia hace un llamado a ver a los creyentes en comunidad.”[189]

Veamos los tres usos del término con un poco más de profundidad.

Todos los Cristianos en la Tierra

Pablo utiliza la palabra ecclesia para referirse a todos los creyentes, o a la iglesia universal. Esto se denota cuando Pablo dice: “No hagan tropezar a nadie, ni a judíos, ni a gentiles ni a la iglesia de Dios” (1 Corintios 10:32). Lo mismo se puede decir de 1 Corintios 12:28 cuando Pablo se dirige a toda la iglesia: “En la iglesia [ecclesia] Dios ha puesto, en primer lugar, apóstoles; en segundo lugar, profetas; en tercer lugar, maestros; luego los que hacen milagros; después los que tienen dones para sanar enfermos, los que ayudan a otros, los que administran y los que hablan en diversas lenguas.”

Todos los Cristianos en un Sólo Lugar

Algunas veces Pablo se dirige a toda la iglesia en la ciudad (1 Tesalonicenses 1:1; 2 Tesalonicenses 1:1; 1 Corintios 1:2; 2 Corintios 1:1 and Romanos 16:1. En otros pasajes, Pablo usa la palabra ecclesia para referirse a un distrito geográfico más grande, tal como lo es Asia o Galacia (1 Corintios 16:1, 19). Por ejemplo: “Las iglesias de la provincia de Asia” (1 Corintios 16:19) esta es una declaración muy amplia acerca de los creyentes en un distrito mayor. Las “iglesias de Macedonia” (2 Corintios 8:1) eran las comunidades cristianas que existían dentro de la región de Macedonia.

Cuando Pablo usa la expresión iglesia de Dios él tiene en mente, por lo general, las reuniones de cristianos que vivían en un lugar específico. En 1 Corintios 1:1-2 Pablo se dirige a la iglesia de Corinto y les dice “iglesia de Dios en Corinto.”

Un Grupo Cristiano Pequeño que Regularmente se Reunía en un Hogar

Pablo también usó la palabra ecclesia para referirse a la iglesia en hogares privados. De manera repetida hemos mencionado ejemplos de ésto a lo largo de todo el libro, los cuales los encontramos en:

Romanos 16:3-5: Saluden a Priscila y Aquila. . . . Saluden igualmente a la iglesia que se reúne en la casa de ellos.

Filemón 2: a la hermana Apia, a Arquipo nuestro compañero de lucha, y a la iglesia que se reúne en tu casa.

Este es el sentido que Pablo utiliza la mayoría de veces cuando usa la palabra ecclesia.[190] Pablo no nos indica que exista ninguna diferencia fundamental entre la iglesia más pequeña en la casa y toda la iglesia de Dios. Dios está de la misma forma presente en toda su plenitud en ambos escenarios.[191] Bill Beckham escribe: “Para ser consistente con la usanza del Nuevo Testamento, la ecclesia no puede ser llamada iglesia en un lugar (la expresión del grupo grande) y no ser llamada iglesia en otro (la expresión del grupo pequeño).[192]

Algunos hoy en día ven a la celebración del domingo como la verdadera iglesia, y a los grupos pequeños como algo menos que la verdadera iglesia. A partir de este corto análisis de Pablo del uso de la palabra ecclesia, vemos los dos aspectos de la iglesia: como algo que es importante, y como algo que es aún vital. Pero debemos permitirle a las circunstancias locales, a las preferencias de las personas, y a la guianza de Dios, que nos dicten el tamaño, la naturaleza, y la frecuencia de ambas reuniones de grupo, la grande y la pequeña, sin realizar una afirmación dogmática sobre una fórmula.

Públicamente y de Casa en Casa

En el Nuevo Testamento, el ambiente de la iglesia en la casa era el principal foco de crecimiento y discipulado para los primeros creyentes. Con todo, Dios bendijo la reunión de esas iglesias en las casas para hacerlas más efectivas. Él desarrolló a líderes llenos de dones para que sirvieran a las Iglesias individuales en las casas y para que las instruyeran públicamente.

En ciertos períodos de tiempo, las iglesias en las casas se reunían frecuentemente en un gran servicio de celebración. Sin embargo, parece que la mayoría de veces las iglesias en las casas sólo se reunían ocasionalmente para adorar y para recibir la enseñanza. Ya sea reunida o dispersa, las iglesias primitivas no eran entidades separadas e independientes. Éstas estaban conectadas a una visión de liderazgo apostólico mayor. Cada tipo de reunión se consideraba plenamente la ecclesia.

Notas

[174]Gehring, p. 25.

[175]Gehring, p. 26.

[176] Giles, 1995, p. 188.

[177] Robert and Julia Banks, 1986, p. 40.

[178]Gehring, pp. 81-82.

[179]Lohfink, p. 224.

[180] David W. Shenk y Ervin R. Stutzman, Creating Communities of the Kingdom: New Testament Models of Church Planting (Creando Comunidades del Reino: Modelos del Nuevo Testamento de Plantación de Iglesias) (Scottdale, PA: Editorial Herald, 1988), p. 92.

[181]Patzia, p. 192.

[182]Gehring, p. 172.

[183] James D.G. Dunn, The Theology of Paul the Apostle (La Teología del Apóstol Pablo) (Grand Rapids, MI: Eerdmans, 1998), p. 541.

[184]Rad Zdero escribe, “La iglesia en Jerusalén lo utilizó [el templo] para eventos de grupos grandes como un suplemento de las reuniones de grupos en los hogares. Primero, los creyentes frecuentaban los patios del templo, posiblemente en masse, a menudo para hacer evangelismo, eventos de sanidad, enseñar, y/u orar. Segundo, las reuniones de los grupos grandes también se daban cuando había un tema controversial que necesitaba ser discutido. Por ejemplo, los creyentes se reunían para discutir el controversial tema de qué hacer con los no-judíos que se estaban convirtiendo. (Rad Zdero, “Apostolic Strategies for Growing and Connecting the Early House Churches,”(“Estrategías Apóstolicas para Crecimiento y para Conectar las Primeras Iglesias en las Casas”) en Nexus: The World House Church Movement Reader (Nexo: El Lector del Movimiento de la Iglesia en la Casa Mundial), Pasadena CA: Librería de William Carey, 2007, p. 127)

[185]Gehring, p. 144.

[186] Frederick F. Bruce, The Epistles to the Ephesians and Colossians (Las Epístolas a los Efesios y a Colosenses) (Grand Rapids, MI: Eerdmans, 1957), p. 310.

[187] Banks, 1995, p. 27.

[188]Lohfink, p. 219.

[189]Alan Richardson, s.v. “Church,” in A Theological Word Book of the Bible (“Iglesia”, en Un Libro de Palabras Teológicas de la Biblia) (Nueva York: La Compañia Macmillan, 1960), p. 48; K. L. Schmidt, op. cit., p. 506.

[190] Millard Erickson, Christian Theology (Teología Cristiana) (Grand Rapids, MI: Baker Book House, 1998), p. 1043.

[191]Gehring, p. 165.

[192]Bill Beckham, “Confirming Governing Principles That Will Guide the Second Stage of the Cell Church Network in Brazil,” (“Confirmación de principios que deben regir y que guiarán la segunda etapa de la Red de la Iglesia Celular en Brasil”) doctoral degree prospectus(prospecto grado doctoral) (San Francisco, CA: Golden Gate Baptist Seminary[San Francisco, CA: Seminario Bautista Golden Gate], 2011), p. 22.