Por Joel Comiskey, Mitos y Verdades de la Iglesia Basada en Células
Debido a que una escuela en Texas no tenía un sistema de rociadores que funcionara, 200 personas perecieron cuando un incendio consumió los edificios. El director comenzó a reconstruir la escuela una vez pasada la conmoción inicial. Llamaron a una empresa líder en equipos de prevención de incendios para que instalara un sistema de rociadores. Cuando se abrió la nueva escuela para su inspección pública, el director señaló los nuevos rociadores en cada habitación para eliminar el temor a otro desastre.
La escuela funcionó sin problemas durante varios años, pero entonces necesitaron ampliar la estructura existente. A medida que avanzaban las obras, hicieron un descubrimiento sorprendente. El nuevo equipo de extinción de incendios nunca se había conectado al suministro de agua. Tenían lo último en tecnología y equipos, pero no servían para nada.
Los detalles importan. En Estados Unidos solemos decir: “El diablo está en los detalles”. La gente utiliza este término cuando describe un contrato complicado con letra pequeña oculta que el destinatario sólo descubre más tarde.
Cuando pienso en el ministerio de la iglesia celular, me he dado cuenta de algunos detalles cruciales que a menudo permanecen ocultos o se pasan por alto, como el sistema de rociadores desconectado. Estos detalles pueden afectar negativamente a la calidad del discipulado, por lo que es esencial aclararlos. He aquí algunos de ellos:
#1. No invitar a creyentes de iglesias creyentes en la Biblia a los grupos celulares-o positivamente, sólo invitar a personas sin iglesia o miembros de la iglesia. Permitir que los cristianos de otras iglesias asistan a las células estanca los grupos celulares y dificulta el verdadero discipulado. ¿Por qué es una mala idea? Primero es la ética cristiana. Robar ovejas o pastorear las ovejas de otra persona no es ético. Segundo, el verdadero discipulado implica la célula y la celebración bajo la misma iglesia local con la misma visión. Hacer discípulos de calidad significa que los que asisten a las células también escuchan la Palabra del pastor principal el domingo. Tercero, el cristiano de otra iglesia no puede ser entrenado para convertirse en un futuro líder y no compartirá el alcance de la célula de la misma manera que los miembros de la misma iglesia.
#2. Control estadístico. Saber lo que está sucediendo cada semana a través del control estadístico profundiza el proceso de discipulado. No tener estadísticas puede llevar fácilmente a grupos fantasmas. La gente sabe quién ha asistido al servicio de celebración del domingo porque todos están presentes. Debido a que las células están fuera de la vista, el equipo pastoral debe entender lo que está sucediendo para atenderlas adecuadamente.
#3. Frecuencia de los grupos celulares. Los grupos celulares semanales mejoran la calidad del discipulado. Practicar el uno-otro semanalmente mantiene a los creyentes agudos y los ayuda a evangelizar más efectivamente. He notado una tendencia en las iglesias a bajar el listón en esta área, pero los grupos mensuales o los grupos cada dos semanas reducen la calidad del discipulado. Algunos miembros no vendrán cada semana, pero cuando el grupo sólo se reúne una vez al mes o cada dos semanas, la ausencia del grupo amplía la brecha de la frecuencia y reduce la calidad del discipulado.
#4. Reunirse en los hogares. Alcanzar fuera del edificio de la iglesia ayuda a los miembros a practicar la hospitalidad y llevar la iglesia a la gente. El ministerio celular es una estrategia de “ir a la gente” más que una estrategia de “venir al edificio”. El edificio añade mucho valor a los grupos celulares: formación, entrenamiento y celebración. Las reuniones de los grupos celulares, sin embargo, tienen otro enfoque.