Encuentros de Dios: Los Peligros

Desarrollo del liderazgo

por Joel Comiskey

Verano 2012

Hemos visto los aspectos positivos de los Retiros Espirituales, pero ¿qué pasa con el lado peligroso? Uno de los peligros clave que ya hemos mencionado es apartarse de la Palabra de Dios y entrar en una regresión psicológica extraña, basada en la emoción en lugar que en las Escrituras. Los encuentros no son un secreto, una experiencia mágica, una experiencia gnóstica en el que la persona recibe una fórmula secreta la cual perfecciona a él o ella para siempre. Debemos recordar que el proceso de santificación es para toda una vida. No vamos a ser perfectos este lado del cielo. Separados del peligro de apartarse de las Escrituras, me permito mencionar dos problemas potenciales:

1. Poner demasiada esperanza de que un Encuentro cambiará a alguien para siempre.

A veces ponemos demasiada acción en las experiencias de un “Tipo de Encuentro” pero se olvidan que la vida cristiana se vive diariamente, semanalmente, mensualmente, anualmente y durante toda la vida. En mi libro, Una Cita con el Rey, escribí lo siguiente:

Dios me ha dado la oportunidad de estudiar y visitar algunas de las iglesias más grandes del mundo. Un fenómeno que he notado en muchas de estas iglesias es el gran interés en los retiros de fin de semana, a menudo llamado Encuentros espirituales con Dios. El propósito de estos retiros es romper las ataduras y fortalezas del pecado en la vida de una persona para que él o ella puedan caminar en libertad espiritual.

Cuando asistí a mi primer Encuentro espiritual, Dios obró poderosamente y le confesé fortalezas de amargura y enojo, así como otros pecados. Dios transformó mi vida, y experimenté una increíble libertad.

Sin embargo, conforme pasaban los meses, me di cuenta de que todavía luchaba en algunas de estas áreas. Me di cuenta que para seguir siendo libre, tenía que acercarme a Dios a diario, confesando cualquier pecado recurrente. Dios me mostró que necesitaba la fuerza de mi tiempo diario para caminar en una continua victoria.

Los Campamentos y retiros son buenos. Dios los usa para hablarnos claramente y con poder. Pero hay un peligro en vivir hoy una experiencia que paso ayer. Tenemos que caminar en un arrepentimiento diario.

Yo creo que el cristiano diario camina a la santificación (por ejemplo, devociones personales, caminando en el Espíritu, etc.) es mucho más importante que el salto ocasional a un Retiro.

2. El exceso de énfasis en el Encuentro, y el daño de las otras partes del proceso de equipamiento (pista de entrenamiento)

He visto que esto sucede en las iglesias celulares. Se emocionan tanto con el Retiro de Encuentro que se olvidan de que el encuentro es solo un paso en el proceso de equipamiento. Se quedan atascados en Encuentros y fallan en conseguir la gente para el entrenamiento y en el liderazgo celular. Una iglesia estaba tan emocionado con el Encuentro que su principal anuncio del domingo fue hacer que la gente se anotara al Encuentros. El esfuerzo de la iglesia y los recursos fueron absorbidos en el pago del Retiro de Encuentro, reclutando personas para asistir, y después haciendo propagando de lo que pasó. Me di cuenta de que la estructura de la célula comenzó a debilitarse y retroceder en lugar de avanzar.

Recuerde que los encuentros son simplemente un eslabón de la cadena, una parte del sistema celular. El objetivo es hacer discípulos que hacen discípulos a través del sistema celular – de los cuales el Retiro espiritual es sólo una parte. ¿Cuál ha sido tu experiencia en dar equilibrio a los Encuentros con el resto del sistema celular?