Month: October 2012

by Steve Cordle

Teams can do what individuals can’t. When people are part of teams, they gain courage, maximize their strengths, minimize their weaknesses, contribute to a cause and more.

When Jesus sent his followers out 2 by 2, they knew were not going on a walk, they were being sent on a mission. They knew that they were to preach the gospel, heal the sick and cast out demons. Their journey had purpose, and shared purpose is an essential part of becoming a team.

A cell group can become a team working together toward a common goal. One way to foster a sense of team in your group is to regularly emphasize the purpose of the group.

One church’s youth cell ministry makes it a practice to start every meeting by having the leader remind the students of the 3 purposes of their group. It’s no coincidence that that ministry is thriving and multiplying.

If at your next meeting you ask your group, “What are we trying to accomplish?”, what would they say? The clearer their response, the more chance the group has of becoming a team.

When the members of the group understand the purpose, then they can use their gifts and efforts to make a contribution. Some groups choose to designate individuals in the group with specific roles that will help the whole: one will scout for mission opportunities, another in charge of the worship, another organizing food, and so on.

When a group of people work toward a common purpose, they often create strong relational bonds. That’s why retiring professional athletes will say that what they will miss to most is the other players. It’s why military units hold reunions decades after their mission ended.

Every team organizes around its purpose. Is that purpose clear in your cell ministry? If so, it is close to becoming a team.

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Steve

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Propósito: ¿Cómo una célula se convierte en un equipo?

Por Steve Cordle

Los equipos pueden hacer lo que los individuos no pueden. Cuando las personas son parte de los equipos, adquieren valor, maximizan sus fortalezas, minimizan sus debilidades, contribuyen a una causa y más.

Cuando Jesús envió a sus seguidores de 2 por 2, saban que no iban a dar un paseo, sino que fueron enviados en una misión. Ellos saban que iban a predicar el evangelio, sanar a los enfermos y echar fuera demonios. Su viaje tena un propósito, y un propósito compartido es una parte esencial de convertirse en un equipo.

Un grupo celular puede convertirse en un equipo de trabajo hacia un objetivo común. Una forma de fomentar el sentido de equipo en su grupo es de destacar regularmente el propósito del grupo.

Un ministerio de jóvenes de la iglesia celular hace una práctica al comenzar cada reunión, el lder recuerda a los alumnos de los 3 propósitos de su grupo. No es ninguna coincidencia que ese ministerio está creciendo y multiplicándose.

Si en su próxima reunión usted pregunta a su grupo: “¿Qué estamos tratando de lograr?”, ¿Qué diran? Cuanto más clara sea su respuesta, hay más posibilidades que el grupo se convierta en un equipo.

Cuando los miembros del grupo entienden el propósito, entonces pueden usar sus dones y esfuerzos para hacer una contribución. Algunos grupos optan por designar a los individuos en el grupo con roles especficos que ayudarán a todos: uno para explorar oportunidades misioneras, otro a cargo de la adoración, otro en la organización del alimento, y as sucesivamente.

Cuando un grupo de personas trabajan con un objetivo común, a menudo se crean fuertes lazos relacionales. Es por eso que los atletas profesionales dicen que lo que mas van a extrañar es a la mayora de los otros jugadores. Es por eso que las unidades militares celebran reuniones décadas después de que su misión terminó.

Cada equipo organiza su propósito. ¿Esta claro el propósito en su ministerio celular? Si es as, está cerca de convertirse en un equipo.

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Steve

By Michael Sove

The dream of my heart is to form a team of reproducing disciple-makers. Some would call it a G-12 or a discipleship cell. This would be a group of leaders I have raised up, who are leading their own open cells and raising others in their cells to go out and do likewise.

But that is my dream and I’m just starting to walk toward it. What I have right now is my open cell. This open cell has the purpose of evangelism and is a fishing pool for potential leaders. Since I see everyone as a potential leader I’m trying to develop all the people in my cell to whatever level they are willing to be developed.

Last night nine men gathered for the cell that meets weekly at my home. This cell contains three brand new believers who are less than four months old in Christ. I want to involve them from the very beginning so they see their potential and value to our community and God’s kingdom. So as a group we do some things together as a team. For example, once a month we serve as outside greeters at one of our Sunday services. Once a quarter we serve together on a servant evangelism project in our community that we choose as a team. It is in those settings I can see things like faithfulness, passion and gifts in action.

I learn a lot by watching how the guys function as a team. Each week we take turns bringing refreshments. I break the larger group into teams of three for prayer and ministry to one another. I always mix the groups so they contain new believers and experienced believers. It is through these simple tasks and small sub groups that I can learn much about those I’m trying to develop. I can see potential and areas needing more development.

Within my larger cell I have two people who I share some of the larger tasks with. Things like leading worship, facilitating discussion, caring for people within the cell. I look to them for sharing the leadership of the cell. We are truly a team. All the men of our cell are being pointed toward our discipleship process which includes our Consolidation and School of Leaders tracks. The more people I can get through the discipleship process who are getting practical experience within the cell, the greater the chance we’ll plant more reproducing cells from my current open cell.

When these guys launch their own cells they will now become the first members of my dream team. What are you doing in your cell to develop your dream team?

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El equipo soñado

Por Michael Sove

El sueño de mi corazón es el de formar un equipo de reproducción de hacedores de discpulos. Algunos lo llamaran G-12 o discipulado celular. Se tratara de un grupo de lderes que he levantado, que están al frente de sus propias células y levantan a otros en sus células para salir y hacer lo mismo.

Pero ese es mi sueño y estoy empezando a caminar hacia el. Lo que tengo en este momento es mi célula. Esta célula tiene el propósito de evangelizar y una piscina de pesca para los lderes potenciales. Como veo a todos como un lder potencial, estoy tratando de desarrollar a todas las personas de mi célula a cualquier nivel que estén dispuestos a desarrollar.

Anoche nueve hombres se reunieron en la célula que se reúne cada semana en mi casa. Esta célula tiene tres nuevos creyentes que tienen menos de cuatro meses de edad en Cristo. Quiero que participen desde el principio para que vean su potencial y el valor a nuestra comunidad en el reino de Dios. As que, como grupo, hacemos algunas cosas juntos y como un equipo. Por ejemplo, una vez al mes servimos como anfitriones en nuestro servicio dominical. Una vez por trimestre servimos juntos en un proyecto de evangelización en nuestra comunidad que elegimos como equipo. Es en esos lugares donde puedo ver cosas como la fidelidad, la pasión y dones en acción.

He aprendido mucho observando y cómo los muchachos funcionan como un equipo. Cada semana se turnan para traer refrigerios. Divido los grupos más grandes en equipos de tres para la oración y el ministerio a otros. Siempre mezclo los grupos para que contengan nuevos creyentes y creyentes experimentados. Es a través de estas tareas simples y pequeños subgrupos que puedo aprender mucho de los grupos que estoy tratando desarrollar. Puedo ver el potencial y las áreas que necesitan mayor desarrollo.

Dentro de mi célula grande, tengo dos personas que comparto algunas de las tareas más grandes. Cosas como lder de adoración, facilitación al debate, y el cuidado de las personas dentro de la célula. Los veo compartiendo el liderazgo de la célula. Somos un verdadero equipo. Todos los hombres de nuestra célula han sido apuntados hacia nuestro proceso de discipulado, que incluye nuestra consolidación y la Escuela de Lderes. Entre mas gente obtenga a través del proceso de discipulado que está consiguiendo experiencia práctica dentro de la célula, mayor es la probabilidad de plantar más células reproductoras desde mi célula en ese momento.

Cuando estos muchachos pongan en marcha sus propias células, se convertirán en los primeros miembros de mi equipo soñado. ¿Qué estas haciendo en tu célula para desarrollar tu equipo soñado?

Michael

by Jeff Tunnell

Ecclesiastes 4:9-10 comes immediately to mind for me on this topic of team ministry.

Two people are better off than one, for they can help each other succeed. If one person falls, the other can reach out and help. But someone who falls alone is in real trouble.

The conclusion in verse 12 is beautiful:

A person standing alone can be attacked and defeated, but two can stand back-to-back and conquer. Three are even better, for a triple-braided cord is not easily broken.

This passage has been applied in various ways; travelers, business partners, husband & wife, etc., yet the principle is sound!  Having intimate companions and co-workers brings confidence and collaboration, encouragement & excitement, protection & power. Building a small team for your leadership of the cell lays a foundation for success and a pattern for the future in supervising multiple cells or an entire organization.

Discouragement WILL come, attacks from the enemy WILL occur, even well-meaning friends WILL make comments that can slow you down in your desire to lead well in the body of Christ.  Make certain, from the beginning, that you will work in a team!  It is unlikely that all of those in your inner circle will be discouraged at the same time.  When you are ‘falling’ the others will reach out and help!

Life is better together,

Jeff

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Dos son mejor que uno

Por Jeff Tunnell

Eclesiastés 4:9-10 viene inmediatamente a la mente para m en este tema de ministerio en equipo.

Dos personas están mejor que uno, para que puedan ayudarse uno a otro a tener éxito. Si una persona se cae, el otro puede extender la mano y ayudar. Pero alguien que se cae solo esta en un verdadero problema.

La conclusión en el versculo 12 es bella:

Una persona de pie por s sola puede ser atacada y derrotada, pero dos pueden estar espalda-a-espalda y conquistar. Tres es mucho mejor, un cordón trenzado triple no se rompe fácilmente.

Este pasaje ha sido aplicado en varias formas, los viajeros, los socios de negocios, esposo y esposa, etc., y sin embargo ¡el principio es el sonido! Tener compañeros ntimos y compañeros de trabajo brinda confianza y colaboración, ánimo y entusiasmo, protección y poder. Construir un equipo pequeño de liderazgo en la célula sienta las bases para el éxito y un modelo para el futuro en la supervisión de varias células o una organización entera.

El desánimo vendrá, los ataques del enemigo va a ocurrir, incluso buenos amigos harán comentarios que pueden reducir la velocidad de tu deseo en llevar bien el cuerpo de Cristo. Asegúrese de que, desde el principio, que ¡vas a trabajar en equipo! Es poco probable que todos los de su crculo ntimo se desanimaran al mismo tiempo. Cuando usted está “cayendo” ¡los otros te tenderán la mano y ayudaran!

La vida es mejor juntos,

Jeff

 

by Joel Comiskey

It’s interesting how Jesus sent his disciples out in teams of two to plant house churches that would eventually reach the entire village (Luke 9:1-6; 10:1-11). We’ve talked about team ministry before on this blog, but I don’t think we can talk about it enough.

The early church followed Christ’s example when starting house churches. The house church planting team of Aquila and Priscilla planted house churches in various parts of the Roman empire (Acts 18:26; Rom 16:3;1 Cor 16:19;2 Tim 4:19). Paul the apostle also depended on a team in his missionary endeavors (Acts 12:25; 13:1; 15:39). In fact, the norm in the early church was to have a team of leaders over the house churches. Paul, for example, told the leaders of the Ephesian church that the Holy Spirit had made them “overseers” of the flock (Acts 20:28)

When writing to the church at Philippi, Paul greeted the congregation and, separately, the “overseers” (Phil. 1:1). When he wrote to Titus, Paul directed him to appoint elders, whom he also identified with the functions of “overseer” (Titus 1:5–7). Michael Green writing about early church leadership says,

Leadership was always plural: the word `presbyter’ from which we derive `priest’ is regularly used in the plural when describing Christian ministry in the New Testament. They were a leadership team, supporting and encouraging one another, and doubtless making up for each other’s deficiencies. This team leadership is very evident in the missionary journeys of the New Testament, and Acts 13:lff. is particularly interesting. It indicates not only a plural leadership in Antioch, consisting of five members, but diverse types of leadership: some were `prophets’ relying on charismatic gifts, while others were `teachers’ relying on study of the Scriptures (Evangelism in the Early Church, p. 25, Kindle Edition).

I find it much more liberating to tell future leaders that they will not be leading the group individually but will function in a team. Potential leaders feel more secure when knowing they won’t have to do everything themselves. New groups are also much healthier when led by a leadership team.

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Joel

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De dos en dos

Por Joel Comiskey

Es interesante ver cómo Jesús envió a sus discpulos en equipos de dos personas para plantar iglesias en las casas que con el tiempo alcanzaron a todo el pueblo (Lucas 9:1-6; 10:1-11). Hemos hablado acerca del ministerio en equipo antes en este blog, pero no creo que podamos hablar de ello lo suficiente.

La iglesia primitiva siguió el ejemplo de Cristo al comenzar iglesias en las casas. El equipo de plantación de casa de Aquila y Priscila plantaron iglesias en las casas en varias partes del imperio romano (Hechos 18:26, Rom 16:03, 1 Cor 16:19, 2 Tim 4:19). El apóstol Pablo también dependa de un equipo en sus esfuerzos misioneros (Hechos 12:25; 13:1; 15:39). De hecho, la norma en la iglesia primitiva era tener un equipo de lderes en las casas iglesias. Pablo, por ejemplo, le dijo a los lderes de la iglesia de Efeso que el Espritu Santo les haba hecho “supervisores” del rebaño (Hechos 20:28)

Al escribir a la iglesia de Filipos, Pablo saludó a la congregación y, por separado, los “supervisores” (Fil. 1:1). Cuando escribió a Tito, Pablo le ordenó a nombrar a los ancianos, a los que también se identifican con las funciones de “supervisor” (Tito 1:5-7). Michael Green escribió sobre el liderazgo de la iglesia primitiva, y dice,

El liderazgo siempre fue plural: la palabra ‘presbtero’ de la que deriva “sacerdote” es usado regularmente en plural cuando se describe el ministerio cristiano en el Nuevo Testamento. Eran un equipo de liderazgo, apoyo y animándonos unos a otros, y sin duda compensando las deficiencias de los demás. Este equipo de liderazgo es muy evidente en los viajes misioneros del Nuevo Testamento, en Hechos 13, es particularmente interesante. Esto indica no sólo un liderazgo plural en Antioqua, compuesto por cinco miembros, pero en diversos tipos de liderazgo: algunos eran ‘profetas’ confiando en los dones carismáticos, mientras que otros eran ‘profesores’ que se apoyaban en el estudio de las Escrituras (Evangelismo en la Iglesia Primitiva, p. 25, Kindle Edition).

Lo encuentro mucho más liberador para decir a los lderes futuros que no serán lderes en el grupo de forma individual, pero funcionarán en un equipo. Los lderes potenciales se sienten más seguros al saber que no tendrán que hacer todo ellos mismos. Los nuevos grupos son también mucho más saludables cuando son dirigidos por un equipo de liderazgo.

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Joel

by Mario Vega

The house played an important role in the early decades of Christianity. In the first century the house was the main place where people lived and worked. Today it is quite different since people only live in their homes. For this reason, it is difficult for us to imagine how central the home was back then since it as the main center of operations.

Back then, when people were converted, often the entire household believed in Jesus. On other occasions, Jesus told his followers that he would bring division between members of the same household–between those who followed him and those who refused to do so. The truth is that in one way or another, the houses were the line that constituted the difference between faith and unbelief.

From the beginning it was through the houses that the church engaged the world. The background of the house definitely influenced the theological reflection of the early Christians. To them, it was like following the model of Jesus who developed his ministry in houses. Therefore, it should not be surprising that after the resurrection of Jesus the Church gathered in the upper room of a house (many believe this was the same upper room where Jesus and the disciples celebrated their last Passover together). The disciples wanted to continue the tradition that Jesus had initiated.

From Jerusalem on, the expansion of the gospel happened from house to house, city to city and nation to nation. Thus, the gospel transformed individual households and eventually the entire world.

Today, the family is still the foundation of society. If Christians believe this is true, we have more reason to continue to sow the seed of the gospel from house to house.

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Los primeros cristianos y las casas.

La casa jugó un papel muy importante en las primeras décadas del cristianismo. La casa era en el siglo I tanto el principal lugar de producción como de consumo en la sociedad. Muy diferente al presente cuando la casa es solamente un lugar de consumo. De all que para nosotros sea difcil imaginar el gran impacto que en su momento produjo el hecho que el evangelio tomara como centro de operaciones a las casas.

El evangelio representó muchas veces la conversión de casas enteras. En otras ocasiones el Señor Jesús estableció el reto que seguirle a él, bajo algunas circunstancias, poda representar romper con la casa. Lo cierto es que, en un sentido u otro, las casas fueron la lnea que estableca la diferencia entre la fe o la incredulidad.

La primera forma de constituirse la iglesia y de relacionarse con el mundo fue a partir de las casas. Tal situación habra de condicionar la reflexión teológica de los primeros cristianos. Para ellos, era seguir el modelo de Jesús quien desarrolló su ministerio tomando como base las casas. Por ello, no debe extrañar que después de la resurrección de Jesús la iglesia volvió a reunirse, como se cree, en el mismo aposento alto donde se haba celebrado la pascua con su maestro. Era evidente que lo que deseaban era continuar la tradición iniciada por Jesús.

A partir de Jerusalén, la expansión del evangelio se produjo de casa en casa, de ciudad en ciudad y de nación en nación. As, el evangelio lo transformó todo por su capacidad para influir en la forma básica de organización social.

Hoy en da, con sus variantes, se dice que la familia es la base de la sociedad. Si los cristianos creemos que eso es cierto, mayor razón para que la iglesia continúe con su esfuerzo de sembrar la semilla del evangelio de casa en casa.